Según informa El País que cita fuentes del Ministerio de Hacienda, el Gobierno aprobará un decreto ley a mediados de diciembre con la subida del impuesto de sociedades y de los impuestos especiales, De esta forma, podrá enviar a Bruselas el detalle del plan presupuestario con las medidas para reducir el déficit público al 3,1% del PIB en 2017. Cristóbal Montoro, titular de Hacienda, aseguró ayer en el Senado que la subida de impuestos no afectará a autónomos ni a pymes.
El Ejecutivo pretende eliminar algunas de las deducciones del impuesto que grava los beneficios de las grandes empresas y subirá la presión fiscal sobre las «externalidades negativas», según fuentes ministeriales. Esto se traduce en un incremento de los impuestos sobre el tabaco y las bebidas alcohólicas. Aún está pendiente de conocer si la medida afectará al vino y a la cerveza o solamente a las bebidas espirituosas de alta graduación.
Hacienda aún estudia como elevar la tributación sobre los hidrocarburos, uno de los tributos sobre los que hay más margen de subida, porque no quiere perjudicar a los profesionales del sector. Lo que está claro, según dijo ayer Montoro, es que el Gobierno no subirá los impuestos a autónomos y pymes. Considera que estos son los que están tirando más del crecimiento económico y están contribuyendo a la creación de empleo.