El Consejo de Ministros aprobó una reforma del Impuesto Especial de Matriculación cuya recaudación es recibida por las Comunidades Autónomas por el cual la tributación de los vehículos dependerá de las emisiones de dióxido de carbono (CO2) de los automóviles.
En concreto, los vehículos de turismo que emitan menos de 120 gramos de CO2 por kilómetro quedarán exentos del impuesto, que se situará en 4,75 por 100 para automóviles que emitan entre 121 y 160 gramos de CO2 por kilómetro, en el 9,75% para emisiones de entre 161 y 200 gramos de CO2 y en el 14,75% para vehículos que emitan más de 200 gramos de CO2 cada kilómetro, así como para quads y motos acuáticas.
Actualmente, el Impuesto de Matriculación prevé dos tipos de gravamen en función de la cilindrada del vehículo. Así, el tipo es del 7 por 100 para los coches de gasolina de menos de 1.600 centímetros cúbicos y vehículos diésel hasta 2.000 centímetros cúbicos, mientras que para vehículos de cilindradas superiores el tipo se eleva al 12 por 100.
El 7,7 por 100 de los turismos y todoterrenos comercializados en 2006 (125.662 unidades) emitía menos de 120 gramos de CO2 por kilómetro, el 56 por 100 emitía entre 121 y 160 gramos (915.778 unidades), el 27,8 por 100 emitía entre 161 y 200 gramos (453.846 unidades) y el 8,5 por 100 emitía más de 200 gramos (139.309).
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