Así lo ha declarado el portavoz de los Inspectores Fiscales, Fernando de la Torre, en una entrevista publicada en cinco días. Desde arriba, dice, nos presionan para cerrar un mayor número de expedientes y para completar más actuaciones. A su juicio es una presión equivocada puesto que hay veces que se pueden acelerar los expedientes y otras que resulta contraproducente. Entiende que la inspección es un instrumento para que el sistema funcione, no para recaudar.
Respecto a los errores y las posibles sanciones por las novedades que ha representado la campaña de sociedades ya finalizada derivadas del nuevo Plan General Contable, aseguró que es inevitable, porque es verdad que ha habido muchos cambios, pero que no se sancionará masivamente.