Los defraudadores fiscales tendrán más dificultades para esquivar al fisco a partir de hoy. Tras la publicación ayer en el Boletín Oficial del Estado de la ley de lucha contra el fraude fiscal, hoy entra en vigor la norma que endurece las sanciones por resistencia y obstrucción a las inspecciones fiscales. Las multas oscilarán entre 1.000 y 600.000 euros.
La norma limita a 2.500 euros las operaciones en efectivo cuando intervengan empresas o autónomos. Además, establece la obligación de informar a Hacienda de los bienes en el extranjero. La nueva ley fija una sanción mínima de 10.000 euros para los contribuyentes que eviten informar sobre sus cuentas, carteras
de valores e inmuebles y, además, establece una multa adicional de otros 5.000 euros por cada dato omitido.
Otra de las novedades de la norma consiste en la supresión del régimen de módulos para determinadas profesiones vinculados al sector inmobiliario como fontaneros, albañiles o transportistas.
Fuente: El País