La Unión Europea aprobó el martes pasado el intercambio automático de información sobre titulares y beneficiarios reales de cuentas bancarias, una propuesta de la Comisión Europea que busca combatir la evasión fiscal tras los escándalos conocidos el las últimas fechas, como el de los ‘papeles de Panamá’
Los ministros de Economía y Finanzas de los Estados miembros (Ecofin) han dado luz verde a esta directiva sin discusión, después de que el pleno del Parlamento Europeo la aprobase el pasado 22 de noviembre. De esta forma, tras la adopción formal de este martes, la nueva legislación entrará en vigor a partir del 1 de enero de 2018.
El Ejecutivo comunitario ha celebrado la aprobación de esta normativa, que asegurará que las autoridades fiscales nacionales tienen acceso a los datos obtenidos sobre beneficiarios reales bajo las normas contra el blanqueo de capitales.
Bruselas ha destacado que estas nuevas reglas incluyen información «importante» como registros de diligencia debida de clientes y datos disponibles en registros nacionales sobre beneficiarios reales.
«Las autoridades podrán ahora identificar más fácilmente a los dueños reales detrás de una compañía opaca o una entidad, así como reaccionar rápidamente en casos de evasión o elusión fiscal», ha explicado la Comisión Europea en un comunicado.
No obstante, los Veintiocho no han sido capaces de lograr un acuerdo con respecto a la directiva de «mecanismos híbridos», que busca combatir que las compañías exploten la disparidades entre los sistemas fiscales de dos o más países para reducir sus obligaciones tributarias.
Sobre esta cuestión, Kazimir ha asegurado que siguen abiertas algunas cuestiones, relacionadas con las normas que permitirán aplicar ciertas excepciones, pero ha asegurado que se ha avanzado en las conversaciones. En la misma línea se ha pronunciado el ministro de Economía, Industria y Competitividad, Luis De Guindos, que espera un acuerdo «en los próximos Consejos».
BASE COMÚN DEL IMPUESTO DE SOCIEDADES
Por otro lado, los ministros de Finanzas han aprobado la hoja de ruta de dos etapas propuesta por el Ejecutivo comunitario para poner en marcha una base imponible común y consolidada del impuesto de sociedades obligatoria para todas las multinacionales que superen unos ingresos de 750 millones de euros.
El enfoque de Bruselas aboga por acordar en un primer paso una base imponible común para el impuesto de sociedades y después comenzar las negociaciones sobre la consolidación de la misma.
También han abordado los responsables de Economía del bloque comunitario el estado de las conversaciones de 10 socios, entre ellos España, para aprobar una tasa a las transacciones financieras, conocida como ‘tasa Tobin’.
El ministro eslovaco ha explicado que se han logrado progresos en los principales elementos de la propuesta, pero que es necesario más trabajo en otras áreas. Tras la marcha de Estonia en marzo, los países que siguen formando parte de esta «cooperación reforzada» son España, Austria, Bélgica, Francia, Alemania, Grecia, Italia, Portugal, Eslovaquia y Eslovenia.