Carlota Arbaiza, de Orozko, y Nerea Banderas, de Bilbao, estudiantes las dos del doble grado de ADE y Derecho en el campus de Sarriko, están empezando a ponerse nerviosas. Afrontan su último curso, el quinto, y pronto tendrán que hacer frente al reto de insertarse en el mercado laboral en un momento en el que hay un 40% de paro juvenil. Confían en su talento y traen su currículum en sus mochilas. Tienen en mente seis empresas a las que aspirar y vender su talento. Kutxabank, Garrigues, Grupo IMQ, Zaintzen, Bricomart, Dronak… entre ellas. Saben con certeza, porque la UPV así se lo ha comunicado, que tienen vacantes. «En la Universidad estamos superprotegidas y salir a la realidad resulta un poco agobiante. ¿Y si luego no tenemos trabajo? A estas alturas de curso, todo el mundo empieza a buscar prácticas, a hacer entrevistas, a elegir destino… Se supone que la carrera que estamos haciendo tiene un amplio abanico de empleos que poder desempeñar, pero nunca se sabe. Buscamos empresas que tengan una sección jurídica, creemos que pueden necesitarnos, y aquí hay una de fabricación de drones que también nos ha llamado la atención. Por intentarlo…», comentan las dos chicas casi al unísono.
Ingenieros y perfiles sociales
Estas dos amigas son dos de los cientos de estudiantes que este jueves se han pasado por el Foro de Empleo organizado, en colaboración con Lanbide, por el campus vizcaíno de la UPV/EHU en el Bizkaia Aretoa. Los responsables de Recursos Humanos de 47 grandes y pequeñas empresas han buscado candidatos «frescos». A su disposición han puesto 253 ofertas de trabajo. La mayoría querían perfiles de ingenieros y de ciencias sociales (Derecho, ADE, educadores sociales) con un máster o un doctorado en su haber e investigadores. En sus manos tenían ya el currículum de más de medio millar de jóvenes, a los que han tenido ocasión de entrevistar en persona. Pero también han atendido a titulados en paro y a exalumnos de la UPV en activo que aspiran a un trabajo mejor.
El objetivo de este encuentro, que se celebra por primera vez en el campus de Bizkaia -el 14 de febrero tuvo lugar uno similar en Vitoria y el próximo día 28 la UPV lo organizará en Gipuzkoa-, es «promover la empleabilidad del alumnado y los titulados, y facilitar el contacto entre estos jóvenes y empresas que buscan perfiles concretos». «Nuestros estudiantes tienen que sentir que, una vez finalizados los estudios, pueden acceder al mercado laboral sin problema. En determinadas titulaciones van a tener buenas ofertas de trabajo antes de acabar la carrera», señalaba la vicerrectora de Estudiantes y Empleabilidad, Txelo Ruiz. «Estamos saliendo de la crisis y se nota. Se solía decir que la Universidad es una fábrica de parados y hay que decir que eso es completamente falso. Lo dicen las estadísticas», ha subrayado.
«Hemos recibido a cinco personas. Buscamos un perfil bastante específico. Ingenieros industriales o mecánicos y aeronáuticos recién titulados o de último curso. De momento, ninguno se ajustaba a lo que necesitamos», indicaban las responsables de Recursos Humanos de la empresa ITP Aero. En Ulma Piping, con sede en Oñate, tenían buenas vibraciones. «Hemos atendido a cuatro, dos de ellos estaban en paro, y todos encajan en el perfil. Uno de ellos nos ha gustado, tiene un currículum más potente.Hacemos bridas para grandes tubos. Buscamos ingenieros con especialidades electrónicas e informáticas. Queremos gente proactiva, con iniciativa propia, que no esté esperando a que se les diga lo que tienen que hacer. No es algo que se vea en una primera entrevista, pero si el currículum encaja, siempre hay más tomas de contacto», advertían Mertxe Ibabe y Laida Beristain.
Ingry Gutiérrez, estudiante de último curso de Ingeniería Química Industrial se mostraba esperanzada, era una de las candidatas. «Estoy buscando prácticas y ya he hablado con tres empresas. En cualquier caso, tener la posibilidad de estar en persona es mejor que buscar a las empresas solas por tu cuenta enviando currículums», reconocía esta joven.