Algunos especialistas propone una serie de cambios para activar el mercado de trabajo favoreciendo las políticas activas de empleo, desincentivando las prejubilaciones e incentivando el trabajo a tiempo parcial
Negociación colectiva: Debería establecer salarios estableciendo teniendo más presente la productividad diferencial de los distintos sectores, empresas y trabajadores. Los salarios no deberían subir más que la productividad. La indexación (crear una vinculación entre el crecimiento del salario al crecimiento de los precios de consumo) es una práctica especialmente negativa para el control de la inflación y la estabilidad macroeconómica.
Costes de despido: La protección laboral, como los costes del despido, no deberá se excesiva hasta el punto de provocar una dualidad acusada en el mercado de trabajo entre los segmentos de contratos fijos y temporales.
Subsidios de desempleo: Deberán incentiva la búsqueda activa de trabajo, reformando las condiciones para su acceso y evitando el rechazo abusivo de ofertas de trabajo.
Contratación a tiempo parcial: Se recomienda su desarrollo porque permite simultanear otras actividades como los estudios o la atención familiar, confiriendo una mayor flexibilidad al mercado laboral. Para conseguirlo, es necesario que el trabajador a tiempo parcial tenga los mismos derechos y deberes, proporcionalmente, que el trabajado a jornada completa.
Movilidad laboral: Uno de los secretos del éxito del mercado laboral americano a la hora de crear empleo es el elevado grado de movilidad geográfico de los trabajadores, algo muy distinto de lo que sucede en Europa.
Contrataciones especiales: Se recomienda el impulso de medidas específicas para facilitar la contratación de colectivos con especiales dificultades como jóvenes, mujeres, discapacitados y mayores de 50 años, como bonificaciones en las cotizaciones laborales y otras ayudas.
Prejubilaciones: Desincentivación de la jubilación antes de los 65 años. La experiencia es clave en muchos puestos de trabajo y las jubilaciones anticipadas no crean empleo.
Políticas activas de empleo: Deben funcionar los mecanismos de apoyo a la búsqueda de empleo: difusión amplia y puntual de las vacantes de trabajo; actuaciones dirigidas a colectivos específicos (jóvenes, mujeres, etc.), facilitar la formación profesional, ayudas a la creación de empresas por desempleadosÃ
Fomento del espíritu empresarial: Se debería estimular la creación de empresas, eliminando trámites burocráticos innecesarios, así como la formación desde la enseñanza obligatorio sobre el funcionamiento y técnicas empresariales.
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