El Gobierno va a imponer la retribución variable por objetivos y desempeño a todos los funcionarios, empleados laborales y eventuales del Estado, de las comunidades autónomas y entes locales para ahorrar costes e incrementar
la productividad y establecer una estructura salarial más justa y homogénea.
Con este fin, el Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas se ha reunido con representantes de los afectados y va a crear una mesa de trabajo para elaborar un Real Decreto.
De esta forma, el Gobierno equiparará los salarios y criterios retributivos de los cerca de tres millones de funcionarios que hay en España y ligará a principios de productividad y rendimiento la parte variable, que supone entre el 15% y el 20% de los sueldos.
En principio, esto supondrá que quienes cumplan los objetivos que se hayan fijado seguirán cobrando lo mismo –aunque no se descartan aumentos en casos concretos– y, quienes no lo hagan, verán reducidas sus retribuciones.
Se ha abierto el melón, certifican los cuerpos de altos funcionarios, que se han reunido recientemente con los secretarios de Estado de Administraciones Públicas, Antonio Beteta, y de Presupuestos y Gastos, Marta Fernández Currás. Se trata de una vieja demanda del sindicato de altos funcionarios del Estado, Fedeca, que pedía que se premiara la productividad en la administración.
Se abre así el proceso de preparación del Decreto que desarrollará el Reglamento de la Ley del Estatuto del Funcionario Público, que sacó adelante el exministro de Administraciones Públicas, Jordi Sevilla, en 2007. Sevilla no consiguió aprobar el Reglamento. Los sindicatos mayoritarios lo impidieron.
Ahora la situación en la que se encuentra la economía española es muy diferente, y por ello se impulsan con más determinación reformas del sector público. El desarrollo puede ser rápido, ya que sólo tendría que validarlo el Con
sejo de Ministros.
Fuente: Expansión