El Real Decreto-ley 14/2017, de 6 de octubre (BOE del 7), aprueba la reactivación extraordinaria y por tiempo limitado, hasta el 30 de abril de 2018, del programa de recualificación profesional de las personas que agoten su protección por desempleo (Plan PREPARA).
Desde su aprobación el Plan PREPARA ha dado cobertura a casi un millón de personas en toda España. La renovación de este programa es fruto del acuerdo al que llegaron Gobierno y Comunidades Autónomas por unanimidad, en la reunión mantenida el pasado día 18 de septiembre en la LXVI Conferencia Sectorial de Empleo y Asuntos Laborales, tras varios meses de negociación.
Ese mismo proceso de negociación se ha llevado a cabo, en el marco del Diálogo Social, con los interlocutores sociales, con los que el Ministerio de Empleo y Seguridad Social llevaba cerca de cuatro meses trabajando, en el marco de la Mesa del Plan de Choque para el Empleo, para garantizar y acordar que el Gobierno pudiese garantizar la continuidad del PREPARA.
En virtud de ese acuerdo, para recuperar el Programa se atribuyen excepcionalmente al Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE) las funciones de concesión y pago de la ayuda económica de acompañamiento, con el fin de asegurar su continuidad. Con ello se logra no perjudicar a un colectivo que ha agotado su protección por desempleo.
Doce prórrogas
Hasta ahora el PREPARA se había prorrogado de forma automática en doce ocasiones; la vigencia de la última finalizó el día 15 de agosto de 2017. Sin embargo, tras una sentencia del Tribunal Constitucional del pasado 20 de julio que consideraba que centralizar en el Servicio Público de Empleo Estatal la gestión de la ayuda económica a desempleados que han agotado el paro contraviene el orden constitucional de distribución de competencias en materia de empleo, se acordó por consenso la mejor forma de evitar un solo día de desprotección de quienes tuvieran acceso al programa.
Por ello, y tras finalizar su vigencia, era necesario aprobar un nuevo Programa que permita mantener el nivel de protección de las personas desempleadas de cara al futuro, pero también incorporando a aquellas que hubieran agotado su protección por desempleo entre el 16 de agosto y la fecha de aprobación de esta norma. Así, se evita que se produzca una discontinuidad respecto de los programas anteriores, con la consiguiente desprotección de los desempleados, lo que justifica la aprobación urgente de la norma.