El 13 de octubre de 2016, el Consejo ha aprobado su posición sobre una Directiva destinada a proteger a los trabajadores de la exposición a agentes carcinógenos o mutágenos en el lugar de trabajo. Se abre así la vía para que tengan lugar los debates entre el Consejo y el Parlamento Europeo en torno a la Directiva.
El presidente del Consejo, Jan Richter, ministro de Trabajo, Asuntos Sociales y Familia de Eslovaquia, ha declarado: «El acuerdo alcanzado hoy en el Consejo sobre los límites para los agentes carcinógenos y mutágenos es un paso importante que nos ayuda a hacer frente a la principal causa de mortalidad relacionada con el trabajo en la Unión Europea. Nuestro objetivo es contribuir a salvar 100 000 vidas durante los próximos 50 años. El Consejo ha demostrado hoy su firme compromiso con la protección de los trabajadores».
La Directiva propone fijar límites de exposición respecto de otros 11 agentes carcinógenos más añadidos a los previstos en la Directiva de 2004 vigente, a saber:
- polvo respirable de sílice cristalina
- 1,2-epoxipropano
- 1,3-butadieno
- 2-nitropropano
- acrilamida
- determinados compuestos de cromo (VI)
- óxido de etileno
- o-toluidina
- fibras cerámicas refractarias
- bromoetileno
- hidracina
Asimismo, la Directiva revisa los límites para el cloruro de vinilo monómero y los serrines de maderas duras a la luz de los últimos datos científicos.
Habrá requisitos mínimos para eliminar y reducir todos los agentes carcinógenos o mutágenos. Además, los empleadores deberán detectar y evaluar los riesgos asociados a la exposición de los trabajadores a determinados agentes carcinógenos (y mutágenos), y tendrán que prevenir la exposición cuando existan tales riesgos.
Se dispone la sustitución por un proceso o agente químico no peligroso, o que lo sea en menor grado, cuando sea técnicamente posible.
Las cifras que arrojan los estudios sobre enfermedades laborales indican que el cáncer relacionado con el trabajo y causado por la exposición a agentes carcinógenos sigue siendo un problema y seguramente va a seguir siéndolo en el futuro. El cáncer es la primera causa de mortalidad relacionada con el trabajo en la UE. Cada año se atribuye al cáncer el 53 % de la mortalidad relacionada con el trabajo, mientras que el 28 % corresponde a las enfermedades circulatorias y el 6 % a las respiratorias.
Próximas etapas
La Comisión de Empleo del Parlamento Europeo examinará un proyecto de informe en noviembre. La adopción está prevista en febrero de 2017.